Hugo Chávez Frías tuvo
los dos ingredientes: el picante del odio y la dulzura del amor.
Aminta Estela Martínez
Bustamante.
Miembro de c.c.s.p.c.
amintamar999@gmail.com
Hugo Chávez Frías, es en este
momento del siglo XXI, la persona más nombrada y querida por su pueblo
venezolano y gran parte de otros pueblos del mundo. Para las personas que no
estudian su posición en la historia y les interesa un comino la marcha de sus
hermanos de toda la tierra, porque viven alienados por sus gobiernos capitalistas;
es posible que este articulo le sepa a lo mismo que saben sus vidas atiborradas
de consumismo y viviendo la vida como sea, porque sus gobiernos, fanatismos y
creencias alienantes, les impiden ver la realidad externa y por desgracia, su
propia realidad personal.
De conocimiento público
mundial es que, más fácil es sentarse en una mecedora o acostarse en un mullido
sofá, que limpiar la casa si está desordenada. Lo mismo pasa con saber la
verdad de los acontecimientos mundiales que tratar de enterarse. Aunque hoy se
hace accesible conocer lo que sucede en el mundo porque las comunicaciones e
Internet lo facilitan, las gentes prefieren el facilismo del ignorar lo básico
porque es más conveniente. La ignorancia que cultivan en sus pueblos los
gobiernos capitalistas para que reinen sus “lideres” políticos, económicos,
religiosos y académicos, hace que esa ignorancia sea la que rija cada vida de
sus habitantes y las consecuencias catastróficas de quien está a su lado, o las
mismas catástrofes personales, sean tomadas como cosa normal porque así se les
inculca, convirtiendo su incultura en una especie de doctorado en ignorancia.
En “El Príncipe”, ensayo
escrito por Nicolás Maquiavelo en 1532, se redactó una exposición que muchos
personajes mundiales tomaron al pie de la letra. Unos para su bien y otros para
su mal; unos para el bien de la sociedad inmediatamente liderada y otros para
mal. Unos para bien de la sociedad mundial y otros para mal. Por desgracia,
pareciera que el 99% de los tres grupos al que nos referimos a estas alturas
del conocimiento, todavía no hacen la reflexión necesaria o no aprenden la
lección que la historia nos enseña.
En el capítulo de EL
PRINCIPE sobre la crueldad y la clemencia donde describe Maquiavelo si es mejor
ser amado que temido, o ser temido que amado para mantener el poder y control
sobre un pueblo, dice textualmente: “…porque un hombre que quiera en todo hacer
profesión de bueno fracasará necesariamente entre tantos que no lo son. De
donde le es necesario al príncipe que quiera seguir siéndolo aprender a poder
no ser bueno y utilizar o no este conocimiento según lo necesite”. EL PRINCIPE.
La crueldad y la clemencia vienen
estando al interior de los seres humanos y más en el de los líderes del mundo.
Y por malaventura, la gran mayoría de los líderes del pasado y los actuales,
decidieron y deciden seguir el camino más fácil. Y decimos que es aparentemente
más fácil, porque para ahorrar un millón de dólares se necesitan muchos años
para que una persona de normales entradas económicas alcance ese propósito;
pero con una pistola en mano, se podría conseguir en unos minutos. Parece más
fácil este símil que expongo, pero las consecuencias detrás de este tipo de
acciones son bien conocidas, así el asaltante “corone” su objetivo.
Los líderes del mundo en lo
político, religioso, lo económico, arte y ciencias, han preferido tomar los
atajos del facilismo para “reinar” y maltratar a los pueblos que sostenidos en
la ignorancia, prefieren desconocer el origen de sus maltratos que rebelarse
contra los parámetros establecidos a sus espaldas con todos los artilugios de
las ciencias, religiones y hasta la mismísima represión.
Líderes políticos del mundo
que “ayudados” por científicos y religiosos de la conductividad humana, castran
a sus pueblos en lo interno y externo, mientras ellos gozan de status
económicos y glorias efímeras que con el tiempo les toca padecer vergüenzas
cuando la historia desenmascara sus inescrupulosos actos. Ahora bien; desde la
misma biblia, libros tenidos como sagrados, y aún más, libros, tratados y
ensayos de todas las aéreas filosóficas, políticas y psicológicas como los de
Maquiavelo y otros autores de renombre, se viene diciendo sobre la maldad del
hombre y la mujer. Se dice de lo desagradecido del ser humano. De las
ambiciones y cuanto vicio puedan adjudicarles para justificar por ejemplo, que
no se debe ser muy bueno porque con el tiempo el hombre traiciona esa bondad.
Textos salidos de las cabezas frías que nos conducen, pero que no dicen al
mismo tiempo, que después que dañaron al hombre y la mujer en cualquier punto
de la geografía mundial, a través de sus encantos religiosos, filosóficos y
metafísicos, justifican, repito, el mejor ser odiado que querido. Razón
suficiente para entender por qué líderes mundiales de todas las aéreas,
continúan aplicando el sometimiento de la mayor parte de la humanidad para sus
beneficios.
Razón suficiente para
entender que un multimillonario con la extravagante riqueza de 70 mil millones
de dólares por ejemplo, “invierte” en otras compañías para su exitosa carrera
empresarial que le aumenta más la riqueza sin importarle la calamidad de la
gran mayoría de sus hermanos en África y los pobres de sus mismos países.
Razón suficiente para
entender, por qué la mayor parte de líderes mundiales en todas las aéreas
socioeconómicas de la tierra, prefieren ser odiados que amados. Y cuando me
refiero y recalco de, todas las aéreas, lo reitero porque no sólo es líder un
presidente de una Nación, sino que líder es también un activista de una
barriada, un rico, un actor de cine o un zapatero.
¿De qué personajes nos habla
la historia que en vida fueron queridos u odiados? De cientos, quizás miles o
millones. Pero en la política, lo económico, el arte, las ciencias y lo
religioso, podemos destacar a muchos cuando leemos la historia de cada uno y
sus biografías. Cuando investigamos para no seguir siendo engañados. ¿Qué
piensan los habitantes de esos países llamados ricos en este momento sobre el
papel que desempeñan sus líderes y presidentes? ¿Qué podemos pensar del Primer
Ministro de Inglaterra que gobernó en el mismo tiempo de Gandy? Y lo mismo vale
en cualquier parte de la geografía mundial.
La moneda es acuñada con dos
caras para los líderes políticos que actúan positiva o negativamente que serán
odiados o queridos aun en sus tumbas. ¿Cómo recuerdan los judíos a Hitler en
sus memorias? Vivir el cielo o el infierno mental en la memoria de la humanidad,
es la tarea que liderazgos del mundo actual deben cuestionar. Hugo Chávez Frías
es el ejemplo para este momento de la historia, que ahora en vida y aun después
de muerto, su pueblo directo y muchos del mundo, lo aman y seguirán amando por
muchas generaciones. ¿Es cierto aquello sobre la táctica de que es mejor ser
temido que amado puede ser productiva a un nivel político, económico, religioso
o científico? Que todos lo pensemos, porque la humanidad no termina con la
muerte de cada uno de nosotros. Cada uno de nosotros continúa en la mente de
las postreras generaciones, y más, cuando tuvimos algún liderazgo local o
mundial en cualquier área.