jueves, 18 de octubre de 2012

Sacando puntas

¡Asertividad!
Por: Fernando MIer Bolaño

La sarta de diatribas que se levantaron en contra del director técnico de la selección colombiana de fútbol, José Néstor Pekerman, desde el mismo momento que asumió el cargo, y a través de  las cuales se pretendió destruir un proceso que recién comenzaba, ha ido diluyéndose en la hipocresía de aquellos, que manera soslayada se consumen en su amargura.  

En el esplendido momento que vive la selección Colombia, y por supuesto la de su reposado adiestrador, no se necesitan abogados de oficio, para explicar los fructíferos resultados alcanzados hasta el momento. Mucho menos el estratega argentino de 63 años, porque con sus conocimientos y experiencia, se ha ganado a pulso un prestigio y credibilidad a nivel mundial.

Pero si es bueno, hurgar en las circunstancias que desencadenaron el diametral cambio que tuvo la tricolor, a partir de la llegada de Pekerman a la dirección del equipo nacional, con el único fin, de reconocer en forma mesurada, un trabajo congruente, claro y equilibrado.

Es indudable, que cada uno de los pasos dados por Pekerman, con prácticamente la misma platilla de jugadores, dirigidos en el pasado por Hernán Darío Gómez y Leonel Álvarez, están rodeados de asertividad. Primero, porque supo defender sus postulados, sin la necesidad de agredir absolutamente a nadie.

Y en ese orden, ha manejado con tino la conformación de su equipo en todos los sectores: Asesores técnicos, onceno titular, suplentes que juegan como titulares, es decir, ha sido asertivo en el tema de las convocatorias. Lo que siempre fue un dolor de cabeza para otros, para Pekerman, se convirtió en una fortaleza que radica en la observación minuciosa y su autoconfianza.

Ahora bien, la designación de Barranquilla como sede del combinado, así no les guste a muchos en esta Nación, fue una decisión fundamental, con la que también Pekerman les ganó a los incrédulos de Colombia.

Para ratificar todo lo expuesto, después de ver los encuentros eliminatorios anteriores a la era Pekerman, y los últimos cinco partidos de la selección, podemos determinar que se allanó el camino correcto, para llegar a Brasil 2014.

Hasta en el partido amistoso del martes anterior frente a Camerún, quedó evidenciado que el viejo José Néstor, apostó todas sus credenciales con seriedad, para encumbrar a Colombia con un 3 a 0 contundente, y en la rueda de prensa reconoció el talento, la unión y la ambición de su equipo, como claves que conllevarán al país del “jogo bonito”.

Probó a todos sus suplementes y cada uno le respondió, mostrando que la idea futbolística en la totalidad del plantel está clara; no existen ambigüedades, y aunque se pueden cometer errores individuales o grupales, hay una estructura solida, con una coherencia que se transmite de la cabeza a los pies.

El tiempo y el nivel de exigencia, corroborarán que el momento brillante de la selección no es casualidad, como tampoco es casualidad que haya un orientador, que más allá de ser director técnico, es entrenador  estratega y buen comunicador.

La idea futbolística en la totalidad del plantel está clara, no existen ambigüedades, y aunque se pueden cometer errores individuales o grupales, hay una estructura solida, con una coherencia que se transmite de la cabeza a los pies.


No hay comentarios :

Publicar un comentario